miércoles, 3 de febrero de 2016

De Malditos Roedores - Séptima Parte - Capítulo 3.3 - La historia del hámster traicionero

Un día el hámster traicionero comenzó a contar una historia mientras estaban todas las ratas almorzando en el gran salón de la cueva.

Un día -dijo - cuando era considerada una rata más del lugar, las tres ratas a cargo de la cueva, la rata directora las dos ratas que pendían de él, me llamaron a su cueva al fondo de la oficina.

- Tuve de dejar lo que estaba haciendo y correr con mis herramientas a la cueva al fondo.

- De seguro dejo de comer, se comió un goma de mascar con sabor a menta y se fue sin lavarse los dientes - pensó la rata de laboratorio mientras mascaba un poco de queso que había sobre la mesa.

Toqué la puerta de la cueva, ya que más que mal, eran mis ratas superiores y yo solo era un simple hámster que había llegado del extranjero.

- Hola - dije temerosamente y con respecto ante esas ratas - ¿en que los puedo ayudar?¿están contentos con mi trabajo?¿puedo hacer algo por ustedes?"

Desde esos tiempos eran tan ... - nuevamente pensó la rata de laboratorio.

- Mira hámster - dijo la rata más baja, que había pasado de un tono de voz coloquial a un tono más serio, girando hacia hacia mi - necesitamos NOSOTROS que tomes tus cosas, hagas un pequeño bolso con ellas y te vayas ...

- Te vayas muy lejos de aquí - la rata de laboratorio no pudo evitar de pensar que era lo que le iban a decir al hámster.

- ... que te vayas en un par de horas más a la cueva de la casa que se encuentra al otro lado de la ciudad.

- ¿quieren que me vaya en unas horas más a esa casa? discúlpenme, pero ¿no debía de ir mañana a esa casa a arreglar el problema que me indicaron? - les dije a las tres ratas.

- ¿Qué parte de que QUEREMOS que te vayas ahora a la casa no se entiende? Arma tus cosas y ve de inmediato - me dijo una de las otras ratas que se encontraban en el lugar.

- ¿Se entiende o no? - me dijo la tercera rata ya en un tono agresivo.

- Perfectamente - les dije agachando la cabeza - me voy de inmediato a arreglar las cosas. Inclusive, ando con ellas.

Así que salí rápidamente de la cueva buscando ayuda, ya que no tenía nada listo.

No tenía el pequeño bolso, no tenía de dirección de donde quedaba la casa, no sabía cual era exactamente el problema que había que solucionar, no sabía nada de nada, ya que no me había preparado ni para ir al día siguiente, estaba confiando en mi suerte.

- ¿Qué ocurrió entonces? - le preguntó una de las ratas jóvenes al hámster traicionero, que se veía asustada frente a los problemas que podría traer el trabajar con una ratas así.

- Ocurrió que lo primero que hice fue armar un pequeño bolso solo con unas partes de cosas que tenía cerca. Partes que pensé que me podían ayudar. Traté de buscar dentro de mis anotaciones cual era la razón del porqué tenía que ir a aquella casa y con quién debía de conversar. Hablé con otra rata que antes había ido a la misma casa antes para que me orientara que es lo que debía de hacer y sólo con eso pude entender un poco la razón del viaje.

- ¿y?

- Sólo me faltaba saber específicamente una información y lo demás lo debía de improvisar, pero esa información la tenían solo las ratas. Así que tuve que ir de nuevo a la cueva del fondo, agachando la cabeza, no para pedir disculpas, sino para decir que estaba listo, pero asumiendo las consecuencias. Tenía que improvisar.

- ¿Por qué no me sorprende? - se preguntó mentalmente la rata la laboratorio mientras continuaba escuchando el relato.

Estando ya en la cueva les dije - buenas tardes, vengo a decirles que todo está listo. También a preguntarles si los puedo ayudar en algo, si están contentos con mi trabajo, si están tranquilos con éste, si...

- Que patético - pensó de inmediato la rata de laboratorio - es lo único que saber de decir.

- ¿¡Aún no te vas!? - me dijo gritando la rata líder de esa cueva y golpeando la mesa - ¿¡Qué estás haciendo aún aquí!?

- En ese momento, las tres ratas se acercaron a mi, que sólo estaba a un par de pasos de la puerta.

- En aquel momento, la rata líder puso su mano en mi hombro. Su ceño estaba fruncido y enojado al igual que las demás otras ratas.Así estuvieron alrededor de un minuto.

El hámster dejó pasar un minuto en silencio, recordando aquel momento.

- Luego de ese minuto vi como se giraron para mirarse las caras, a los ojos y luego estallaron en una carcajada que aún recuerdo.

- que eres inocente hámster - dijeron - bienvenido a la cueva de ratas. Este es sólo la bienvenida, pero nunca pensamos que ibas a hacer todo lo que te estábamos diciendo, que nunca te ibas a cuestionar lo que mandábamos hacer. Nunca pensábamos que ibas a obedecer tan rápido a nuestras órdenes."

- "Será un buen perro faldero que hará todo por nosotros, sin importar la humillación que tenga que pasar", eso les faltó decir - pensó la rata de laboratorio.

- Y esa es mi historia, era una broma de las ratas líderes. Ahora soy quien está a cargo.

- Ahora es quien está a cargo. El perro faldero de las ratas líderes - terminó de pensar la rata mientras mordía de pensar el último trozo del queso.


martes, 26 de enero de 2016

De Malditos Roedores - Séptima Parte - Capítulo 5.3 - Lavado de dientes versus goma de mascar

Nuevamente, cuando la rata de laboratorio se encontraba caminando luego de haber comido algo en el restorán, recordó que tenía que comprar pasta de dientas ya que se le había acabado la que tenía en la cueva de ratones.

Había pensado llegar a la cueva y pedirle prestado un poco a quien se encontrase en ella, pero ahí fue cuando recordó que no le podría pedir al hámster traicionero, ya que había notado que éste, luego de ir a almorzar (si es que por tiempo iba) no se lavaba los dientes. Lo que hacía era morder goma de mascar que siempre andaba trayendo con él.

Esto le llevaba a dos reflexiones a la rata de laboratorio.

La verdad es que no debe de saber organizarse, si es que ni siquiera tiene tiempo como para ir a la lavarse los dientes - pensaba - ¿Cómo alguien que no puede ni siquiera organizarse para lavarse los dientes, es capaz de tener ese poder y responsabilidad dentro de la cueva de ratones?

Y lo segundo - seguía pensando mientras caminaba - si bien la goma de mascar enmascara el olor a su boca de la comida que comía, no debe de ser muy agradable estar cerca de él.

lunes, 25 de enero de 2016

De Malditos Roedores - Séptima Parte - Capítulo 5.2 - Rata estresada y con el trabajo mal hecho

La rata de laboratorio recordó lo que le dijeron una vez

Hace tiempo que no veía a esa ratita que está con aquellas dos patitas más jóvenes - Dijo la rata de laboratorio mientras estaban leyendo un pedazo de papel con la listas de cosas que había que hacer en la cueva, lista de cosas requeridas por el hámster traicionero.

Lo que pasa - respondió una de las rata jóvenes - la rata estaba con descanso, ya que se encontraba estrellada. Estaba estresada ya que estaba llevando un trabajo y ocurrieron mucho problemas, problemas que hacían fallar lo que estaba haciendo con las patitas más jóvenes. Estos problemas afectaron a otras parte de la ratonera, hasta que no pudo más y tuvo que dejar lo que estaba haciendo para ir a descansar.

O sea, para entender - dijo la rata de laboratorio, mirando al rata joven - realizó un trabajo, tuvo problemas que afectaron a parte de la cueva de ratones y por eso se estrelló y tuvo que ir a descansar a su casa. Ahora está de vuelva, pero los problemas siguen ¿es correcto?

Así es - dijo la rata joven.

Luego de recordar lo anterior, volvió a recordar lo que le había dicho el hámster traicionero antes, cuando éste tenía su máscara de buen roedor.

Aqui todos se pueden equivocar y te pueden dar  una oportunidad, no tengas miedo en equivocarte, toma desiciones - dijo el hámster traicionero - Te cuento, aquí un roedor de mi mismo nivel implantó un nuevo sistema de obtener queso y eso lo ha estado haciendo desde hace un año y aún está aquí en la ratonera y vez, no le ha pasado nada.

Es el lider de la rata estresada - recordó la rata de laboratorio.

Luego de eso, le llegó a la mente otro recuerdo de cuando ya el hámster traicionero ya se había mostrado realmente como era.

Aqui, el año pasado, un roedor a mi mismo nivel implantó otra solución de extracción de queso, un importante roedor. Esto quedó mal y a los seis meses lo expulsaron de la cueva de ratas - dijo el hamster traicionero - Por eso no debes de equivocarte, sino YO tendré que hacer lo mismo contigo por el bien del espíritu de la organización.

¿organización? Cueva de ratas, ¿cual será el afán de decirle de esa manera? - pensó la rata de laboratorio.

Ahora en estos momentos, la rata de laboratorio pensaba lo cuan inconsecuente es el hámster traicionero.


De Malditos Roedores - Séptima Parte - Capítulo 2.3 - Ratas valientes y ratas cobardes

La rata de laboratorio estaba conversando con algunos de los ratones del lugar.

Alguien que alza la voz sobre alguien inferior o con menos poder, alguien inferior tanto física o intelectualmente, sólo porque tiene mayor poder, es un cobarde. Es fácil hacer eso - dijo la rata de laboratorio.

Es valiente quien es capaz de alzar la voz ante alguien que tiene un poder - terminó de decir la rata.

lunes, 11 de enero de 2016

De Malditos Roedores - Séptima Parte - Capítulo 3.2 - Tiburón fuera del agua muere

Una de las pequeñas ratitas recién nacidas, qué tan sólo llevaba una semana en la cueva le dijo a la rata de laboratorio.

Te tienes que adaptar para poder sobrevivir. Si un tiburón, por más preparado que éste, estando fuera del agua no se adapta, muere - finalizó de decir la ratita.

Pero no le pidas a un tiburón adaptarse algo peor de lo que está acostumbrado - dijo la rata de laboratorio - sin extraños sermones, no pidas al tiburón nivelar hacia bajo. La responsabilidad del tiburón es que los demás tiburones se nivelen.

Además - continuó diciendo mientras caminaban a la salida de la cueva de ratas - te pregunto ¿no seria muy irresponsable del tiburón salir del mar?¿Por qué el tiburón debería de estar fuera del agua?¿Por qué el tiburón si tenía que salir del agua no se preparó?¿Qué necesitaba para tener que salir del agua?¿Cómo...

Siempre ganas y piensas que todos son tontos - dijo la ratita en un tono irónico y molesto.


De Malditos Roedores - Séptima Parte - Capítulo 2.1 - La rata de laboratorio se lamenta

Luego de 3 meses ¿lamentas de haber ingresado a esta organización? - preguntó el hamster traicionero.

La rata de laboratorio lo miró y sonrió - ¿lamentó haber ingresado a esta "ratonera"? - se auto preguntó.

Lo que lamento no es haber entrado a esta ratonera, sino que lamento haberte conocido a ti.Lamento que un hamster como tú, los que tienen poder aquí en la ratonera, te hayan dado el poder que tienes.Lamento que hayas tenido  la suerte y las circunstancias de haber estado en el momento preciso, más que el profesionalismo y la capacidad que no tienes.Lamento que mi mala suerte me haya hecho conocerte - pensó en segundos la rata de laboratorio, pero no se lo dijo, ya que recortó una vez algo que alguien le había dicho: "si no tienes nada bueno que decir de alguien, no digas nada"

También recordó la frase "el que tiene el poder y puede, manda; y el que no, obedece"

No, no lo lamento - dijo mirando al hamster.

Ambos sonrieron, pero por distintas razones.

De Malditos Roedores - Séptima Parte - Capítulo 2.2 - Problema

La rata de laboratorio dijo mirando a los ojos al hamster.

Si tu manera de trabajar es deshacerte de los problemas en vez de evitarlos o mitigarlos, yo partiría entonces deshaciéndome de ti - dijo esperando la respuesta políticamente del hamster

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